Las franquicias se han convertido en un modelo de negocio importante en los últimos años, en donde grandes marcas han demostrado crecer aceleradamente.
Si algún día planeas franquiciar tu negocio, es necesario conocer cuál es el proceso que se debe seguir para obtener los mejores resultados y de esta manera lograr alcanzar el éxito. Existen diferentes normas que se deben cumplir, así como acuerdos entre el franquiciante y el franquiciatario.
Para evitar confusiones, te presentamos 7 puntos que NO son las franquicias de acuerdo con la guía El ABC de las franquicias de Estudio Canudas:
- NO es un sistema de distribución de muchos niveles. Es decir, su estructura no es piramidal como en la mayoría de las empresas y no se pagan comisiones según las ventas de los individuos.
- NO es una agencia, por lo que no son representantes locales de las grandes compañías.
- NO es ni una distribución ni una comercializadora. Los distribuidores funcionan como intermediarios, compran al mayoreo y venden a los minoristas. Mientras que los comercializadores hacen lo mismo, pero con los consumidores finales.
- NO es un instrumento de inversión. Los inversionistas solamente dependen de los resultados corporativos para obtener sus ingresos.
- NO es una relación fiduciaria. Esto significa que las personas no obtienen el deber de velar por los intereses de la otra.
- NO es una sociedad. No existe una propiedad común del negocio.
- NO es una relación laboral. Los franquiciantes no tienen responsabilidad sobre los franquiciatarios ni les pagan un sueldo como tal.